Para el sector industrial guatemalteco el desarrollo sostenible se plantea como una necesidad y un reto que introduce elementos novedosos como ambiente, cultura, democracia y paz.
Recientemente, durante el VI Congreso Industrial un grupo de empresarios conscientes de la importancia de mantener, sostener y conservar el desarrollo de la producción nacional se comprometieron a implementar en sus empresas y en sus acciones el nuevo modelo de desarrollo.
“Sin duda el desarrollo sostenible es un modelo de crecimiento económico y social que a largo plazo fortalecerá la actividad productiva del país y permitirá a cada industria planificar con visión de largo plazo”, expresó el presidente del Congreso, Ingeniero Juan José Urruela, al inaugurar el evento.
“Las charlas que escucharemos estos días nos proporcionarán elementos de juicio que nos permitirán revisar los patrones de producción, influirán en nuestra forma de producir, consumir y vivir. Al finalizar fijaremos la posición que el sector industrial seguirá en cuanto a desarrollo sostenible se refleje», concluyó.
En los últimos años hemos conocido varios modelos de desarrollo. Su alcance en la esfera pública y su manejo en organismos internacionales nos han descubierto nuevos horizontes.
“Solo en la década pasada, se habló de modelos hacia adentro, de estrategia nacional, de ajuste estructural, del fomento a las exportaciones. Hoy hemos completado la revisión del nuevo esquema. El desarrollo sostenible se nos plantea como una necesidad, como una urgencia”, indicó por su parte Juan José Gutiérrez, presidente de la Cámara de la Industria de Guatemala, al momento de la clausura del VI Congreso Industrial.
Lejos de buscar simplificaciones, nos advierte que el trabajo con miras hacia el largo plazo es indispensable. No basta con alcanzar el desarrollo. Es imperativo sostenerlo, mantenerlo, conservarlo, resaltó.
“Nuestra tarea de insertar al país en el nuevo orden económico mundial y de combatir la pobreza, se han vuelto permanentes. La meta nunca se alcanza, el objetivo es la labor de cada día”.
“Solo brillará quien encienda sus luces de una buena vez, por todas. Quien limpie su camino, para andarlo una y otra vez”.
“La nueva concepción nos habla del futuro, Introduce elementos novedosos en un modelo de desarrollo, tales como el medio ambiente, la cultura y la democracia. Sin embargo, es necesario agregar un componente indiscutible a esta interpretación: la industria”, indicó.
“En efecto, la industria es la base y el fundamento del desarrollo sostenible. Nuestro sector se ha caracterizado por apuntalar con hechos, con sólidas acciones, todos los modelos nacionales. Nuestro desafío es la realidad, la práctica, la ejecución”.
“Llenamos las manos vacías con bienes y productos nacidos de nuestro esfuerzo. Disminuimos las necesidades del pueblo con bienes que les sirven y productos que hacen sus vidas mejores, más fáciles y más plenas.
“Contestamos con respuestas realistas, preguntas tan duras como qué producir, cómo efectuarlo, dónde, cuándo, para qué, quién debe trabajar, cuánto se le debe pagar”, agregó.
“Las cifras son elocuentes, sumamos un 20% del producto interno bruto, 40% de la población económicamente activa, 50% de las exportaciones.
“Nuestro cuerpo gerencial aporta las mejores decisiones en la definición de objetivos, en el uso de los recursos y en la aplicación de modernos métodos productivos.
Con nuestro fuego conservamos encendida la débil hoguera de la patria, llama que se prende cuando cualquier guatemalteco consume algo extraído de nuestras iniciativas.
Es indiscutible que el proceso de industrialización de Guatemala ha promovido la modernización de nuestra sociedad. Los principales movimientos hacia la evolución del país llevan la impronta, el sello y logros del sector manufacturero”, manifestó.
“Fuimos, somos y seremos los que haremos sostenible el desarrollo. Nuestra trayectoria y nuestras acciones crean y renuevan sin cesar las bases de la Guatemala del mañana”.
Enfrentamos nuestro desafío. Cumplimos con puntualidad nuestro compromiso. Mientras unos observan, critican y esperan; nosotros adelantamos, actuamos y concretamos. Nuestro premio es nuestra misión. Nos sentimos recompensados al completarla.
En efecto, parafraseando el postulado del nuevo modelo de desarrollo mundial, nosotros vamos a sostener el desarrollo”.
“Nosotros hemos esculpido la historia. ¡Que viva la industria nacional! 1Que viva la Cámara de Industria de Guatemala! Gracias amigos industriales. Gracias Guatemala”, concluyó Gutiérrez.
“Para lograr el desarrollo económico sostenible con su consecuente crecimiento es preciso involucrar aspectos como globalización, comercio, estabilidad macroeconómica, clima de inversión, infraestructura, recursos humanos, innovación tecnológica y productividad”, indicó el expositor José Manuel Salazar al impartir la conferencia Desarrollo Económico Sostenible.
“En cuanto a la inversión y el comercio ─dijo─ es importante resaltar aspectos como la eliminación de distorsiones internas en los precios relativos, el acceso seguro a mercados externos, y los servicios de información sobre mercados externos.
La estabilidad macroeconómica y el clima de inversión requiere de estabilidad fiscal, monetaria y de precios; ajustes en el tipo de cambio simultáneos con la reducción de aranceles; reglas de juego claras; marco legal adecuado; trámites ágiles y eficientes”, agregó.
“La productividad y la competitividad exige mejoramiento en la calidad de los recursos humanos; mejoramiento de la infraestructura; apoyo integral para la pequeña y mediana empresa; mejoramiento de los procesos de innovación tecnológica y de la gestión empresarial”, concluyó.
“El tema ambiental es relativamente nuevo, es complejo. En torno a él giran una serie de problemas que requieren de la participación de todos”, indicó el Ingeniero Víctor Suárez al comentar el tema Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible.
Dijo que el crecimiento de la población y la pobreza, el derecho de propiedad y el respeto a ella constituyen los problemas ambientales estructurales. Además de la deforestación, la contaminación de los sistemas acuáticos, la contaminación por los desechos sólidos, la contaminación atmosférica, y la no tecnificación agrícola y de cultivos tradicionales.
A esto se suman problemas institucionales como trámites burocráticos, foros ambientales sesgados y poca capacidad para evaluar proyectos ambientales, además, problemas jurídicos y financieros.
“Proponemos un rumbo nacional de largo plazo, enfoque estable en los proyectos ecológicos, participación privada en la solución de los problemas ambientales, paternidad responsable, reestructurar y reorientar la Comisión Nacional del Medio Ambiente y las Áreas Protegidas, revisar la aplicación de la Ley Forestal.
Revisar y hacer positiva la legislación en materia de desechos y aguas servidas, revisar la legislación de combustibles, fomentar los esfuerzos de reforestación. Estimular la participación privada en la generación de hidroeléctricas, exigir la adecuada utilización de pesticidas e insecticidas agrícolas, estimular la participación productiva y la autogestión ambiental del sector industrial”.
El licenciado Federico Linares dictó la conferencia “Una rutina efectiva para combatir la pobreza”, en la que explicó los principios a seguir para alcanzar un desarrollo que mejore la calidad de vida.
“La rutina a seguir es la inversión global, dijo. La inversión se debe realizar en diferentes áreas como el recurso humano, el capital físico y el tecnológico, agregó. Si se aumenta la inversión se creará empleo y se elevará la producción y el desarrollo”.
Linares mencionó como actividades económicas básicas para el desarrollo económico una visión de largo plazo, un crecimiento acelerado, potenciar el capital humano y la infraestructura física, participación de todos, políticos responsables y dirigentes competitivos, crecimiento por inversión, seguridad jurídica y una cultura de producción.
“El desarrollo sostenible se perfila como uno de los compradores históricos más trascendentales que han adoptado los gobiernos de la región en los últimos tiempos, y a la cual se le está asignando la importancia que amerita”, indicó el Doctor Oscar Santamaría al desarrollar el tema consolidación política, paz y democracia.
“La alianza para el desarrollo sostenible, agregó, al tener un carácter de integridad en su ejecución, requiere la participación de toda la sociedad civil sin exclusiones, para que, en forma conjunta con los gobiernos de la región, podamos abrir a fórmulas de concentración en la solución de los sensitivos problemas que nos aquejan en el presente, fundamentados a su vez en una visión hacia el futuro.
El sector privado como grupo empresarial de especial importancia en la transformación de nuestras sociedades, tiene, en ese sentido, un rol de gran trascendencia que desempeñar contribuyendo a enfrentar la pobreza, destinando recursos para la inversión en capital humano e impulsando el desarrollo sostenible.
Podemos concluir que la paz, la democracia y el desarrollo son elementos que conforman una trilogía indivisible, complementaria e indispensable para impulsar el progreso y el bienestar integral de nuestras naciones. Luis Pazos, economista mexicano, clausuró el VI Congreso Industrial al impartir una conferencia en la que se relaciona la estrategia seguida en su país para iniciar un proceso de desarrollo sostenible. Instó al sector industrial guatemalteco de crecimiento acelerado y a fijar su atención e inversión en aspectos concretos y extensibles al campo del libre comercio mundial.
“Nosotros hemos esculpido la historia” – Gutiérrez
Luis Pazos explica al sector industrial la importancia del desarrollo sostenible para el crecimiento económico de una región.
Juan José Urruela, Presidente del Congreso explica a los asistentes en el mecanismo a seguir. Lo acompañan miembros del comité organizador. en el orden usual Juan Mauricio Wumser. Jaime Botrán, Juan José Gutiérrez, Carlos Vielman y Jorge García.